La Ingeniería Civil tiene un rol muy importante frente a los desastres naturales, como sismos, terremotos, inundaciones y más. No solo la prevención o el rápido y certero accionar nos salvan de un desastre, sino también la resistencia y buena construcción de la infraestructura en la que nos encontremos. 

Debido a su importancia, las obras de infraestructura deben realizarse con el mayor control de calidad, tanto de materiales de construcción como en su proceso constructivo; para tal efecto, en nuestro país se tienen leyes y reglamentos que señalan las normas y especificaciones para proyección, diseño, cálculo, construcción y supervisión de las obras. Dicha reglamentación está apegada a las normas internacionales que emanan de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y nuestro país, al formar parte de ésta, debe apegarse a lo estipulado en ellas.

México cuenta con experimentados ingenieros civiles con diversas especialidades: Estructuristas, Hidráulicos en mecánica de suelos, Construcción sanitaria, además aquellos calificados como responsables de obras, corresponsables de instalaciones (hidráulicas, sanitarias y de gas) y Planificadores. Esta experiencia ha sido útil para mantener en continua actualización nuestra reglamentación la construcción de obras de infraestructura y edificaciones, pues debe considerarse que en nuestro país tenemos distintos tipos de riesgos de desastres como sismos, ciclones y huracanes en las costas; en otras regiones inundaciones por desbordamiento de ríos, trombas y deslaves; erupciones de volcanes e incendios forestales, así como incendios industriales en zonas de combustibles y productos químicos. 

 La ingeniería civil participa de forma primordial para que las obras de infraestructura cuenten con la máxima seguridad y así prevenir el riesgo de desastres; dicha participación consiste en una supervisión estricta y adecuada a cada obra en su sistema y procedimientos constructivos, verificando que se cumplan con los lineamientos establecidos en su normatividad de cálculo, especificaciones de construcción y control de calidad que permitan detectar cualquier falla en los materiales y en el proceso constructivo aplicado. En el caso de materiales, debe observarse su adecuada selección y control de calidad, así como de la herramienta, el equipo y la maquinaria y, por supuesto, de la mano de obra ejecutora y del proceso constructivo, todo ello apegado a un programa de seguridad para evitar incidentes o accidentes, de acuerdo al tipo de obra, el riesgo que implica durante su construcción, la época y los tipos de desastres (naturales o accidentales) que se presenten en la zona correspondiente.

LA PARTICIPACIÓN DE LA INGENIERÍA CIVIL EN CASO DE DESASTRES 

Los desastres que ocurren con más frecuencia en nuestro país son sismos, ciclones, desbordamientos de ríos y desgajes de cerros. Debido a estas condiciones, la ingeniería civil aporta elementos para ayudar a los diferentes organismos que intervienen en caso de siniestros como el CENTRO NACIONAL DE PREVENCIÓN DE DESASTRES (CENAPRED) y el SISTEMA NACIONAL DE PROTECCIÓN CIVIL (SINACROP).

En caso de sismos, se efectúan inspecciones de los daños estructurales en casas, edificios, centros comerciales, estadios, auditorios, hospitales, mercados, vialidades, sistemas de drenaje y de distribución de agua potable, instalaciones de gas y eléctricas, para valorar su estabilidad y operatividad y, de ser necesario, tomar las medidas pertinentes a fin de que no aumenten los daños y de inmediato se restablezcan los servicios primarios de agua, drenaje, energía eléctrica y vialidades. Es por ello que se crean brigadas que intervengan con maquinarias y equipos especiales en el caso de derrumbes y de afectación a vialidades, de acuerdo con programas emergentes de ataque; es así como se consigue evitar al máximo el riesgo, tanto para la población como para los servicios públicos.

Asimismo, se hace una verificación especial de los helipuertos de rescate de emergencia, para que en su momento brinden un apoyo efectivo en el rápido traslado de los lesionados a los hospitales cercanos. En cuanto a los aeropuertos, se revisan pistas, calles de rodaje y plataformas para evaluar la seguridad de la operación y garantizar el adecuado arribo de aviones con insumos de ayuda (alimentos, agua, medicinas, etc.). En el caso de carreteras se realiza la inspección de pavimentos y se revisa si hay derrumbes que obstruyan la circulación; de ser así, se establecen desvíos que aseguren su utilización, inspeccionando puentes y túneles. Para lo anterior se localizan con antelación máquinas y personal capacitado para manejarlas y retirar el escombro. Respecto a las obras sanitarias, se hacen inspecciones de los sistemas de bombeo y, en su caso, de los daños que pudieran presentar los sistemas de drenaje y las plantas de tratamiento de aguas residuales. Por otra parte se revisan los sistemas de distribución de agua potable, sus tanques de almacenamiento, así como los sistemas de bombeo y de conducción a la red de la población.    

En el caso de inundaciones y desgajes, se refuerzan las revieras de los ríos y se establecen vías de desfogue del área inundada. En los desgajes de cerros, se procede a remover el material con herramienta, equipo y maquinaria, tomando todas las precauciones para no poner en riesgo a los trabajadores. En cuanto a las obras hidráulicas, se inspeccionan los diversos tipos de presa y sus sistemas de operación para conocer si las afectaciones que sufrieron pudieran poner en peligro su operación. De haber daños, se toman las medidas de emergencia pertinentes y se indica el desalojo de las poblaciones que pudieran estar en riesgo.

En todos los casos, es el ingeniero civil quien dará instrucciones de como efectuar las labores de inspección de las obras y, en su caso, las labores de rescate, remoción y prevención, todo ello con el fin de evitar daños mayores a los provocados por el desastre.  

CONCLUSIONES

Se requiere que toda la población del país tome conciencia de que los desastres naturales pueden ocurrir en cualquier momento y debemos estar en constante alerta. Por esta razón es fundamental promover la información sobre prevención de desastres del CENAPRED y realizar de forma sistemática los simulacros de evacuación correspondientes, los cuales enseñen a la población lo que se debe hacer cuando sucedan los siniestros e identifiquen plenamente los puntos de seguridad cercanos en su espacio cotidiano. Es así como la ingeniería civil colabora con la cultura de la prevención de la sociedad mexicana. 

Toda la información fue tomada de ésta dirección web:

file:///C:/Users/AGCM2/Downloads/Desastres%20(1).pdf